miércoles, 27 de mayo de 2009

"DEUDA HISTÓRICA", OTRA HUMILLACION MÁS


Un grupo de andaluces -entre los que estábamos varios miembros del BNA- entregamos hace bien poco un escrito a la Mesa del Parlamento de Andalucía, así como a los partidos políticos con representación en la Cámara, en la que mostrábamos nuestra indignación por el acuerdo político alcanzado para el cobro de la llamada "Deuda Histórica".
En el mismo, después de expresar lo que, según nuestro análisis, significaba el término: La deuda que España tiene con Andalucía por haber mantenido hacia ella -históricamente- un trato inferior al de otras zonas del Estado Español, por lo que Andalucía actualmente se encuentra con los peores parámetros socio-económicos de toda la U.E.; lamentábamos que los políticos que nos representan se hubieran atrevido a valorar cientos de años de humillación, haber convertido en euros el sudor de los jornaleros, la desesperación de las madres ante la pobreza, los siglos de explotación social, de aculturación, el expolio de nuestras riquezas, las plus¬valías de los emigrantes, los beneficios enajenados por empresas foráneas gracias a unos salarios de miseria, el usufructo de la cultura popular andaluza para fomento del turismo, la destrucción de nuestro ecosistema, el estable¬cimiento de bases militares, la utilización de nuestro territorio como cementerio nuclear…
Estando seguros de que “La deuda histó¬rica no se pagará hasta que Andalucía se vea resarcida por los cientos de años en que ha sufrido menosprecio. Hasta que España la trate con respeto. Hasta que Andalucía abandone el estado de subdesarrollo y de explotación social en el que se encuentra desde hace siglos. Hasta que disfrute de la misma renta per cápita, del mismo PIB, de los mismos niveles sociales, educativos, culturales y económicos que la media del Estado Español”.
Finalizabamos nuestro escrito asegurando que "La autentica deuda histórica de España para con Andalucía va mucho más allá de lo meramente económico. No existen millones en el mundo que hagan posible la compra de un pueblo. Otórguenle a Andalucía el lugar que por respeto a su historia y a su dignidad como pueblo le corresponde. Permítanle desarrollar sus potencialidades, no le asignen el papel de territorio subsidiado y servil. No se aprovechen nunca del “silencio de muerte de sus conciencias calladas”. Respeto, dignidad y libertad… y entonces comenzará el pago de una deuda que nunca se podrá abonar únicamente con dinero.
Temíamos que solamente nos pagaran con dinero, pero ahora podemos comprobar cómo la humillación sube un escalón más. Mientras a otros territorios, cuyo nivel de vida y prestaciones sociales se encuentran a años luz de Andalucía, le han abonado inmediatamente una supuesta deuda, que nadie sabe de donde ha salido, a los andaluces le van a cancelar la deuda "por compensación" y vamos a cobrarla "como mejor convenga", sin expecificarnos a quien se refiere esa conveniencia.
Es necesario insistir, llevamos tantos años de humillaciones que ya ni nos entereamos de la siguiente. Cuando en nuestro escrito a los parlamentarios exigíamos respeto para Andalucía, el poder -el nuevo/viejo poder de la Junta de Andalucía- nos responde plegándose una vez más a los interes generales del partido al que pertenecen, olvidándose de aquellos que en una ceremonia alienante les reponen eternamente en el sitio de predominio que ocupan.
Para quienes sentimos Andalucía, la "Deuda Histórica" nunca estará pagada. Nunca, hasta que se respete al pueblo andaluz. Y los gobernantes actuales no tienen esa idea entre sus proyectos más urgentes.

1 comentario:

  1. Otro palo más a los andaluces, cuando llegara el dia en el que Andalucia despierte.

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