Me estoy pasando unas Fiestas que "pa qué". Resulta que el día 30 de enero tengo que ofrecer una ponencia en la Universidad de Santiago de Compostela ( salió a relucir mi arrogancia, según mi "sombra"), y aquí ando tecleando palabritas para que me den más o menos quince folios. Entre tanto miro el blog y veo que los compañeros se aplican a fondo. El caso es que en las tierras "galegas" hablaré sobre las investigaciones cualitativas en entornos sociales y políticos.
¿Y eso qué é lo que é? pué ná; lo que el Pollo y el Monty deberían hacer antes de dar un paso en la política local. Monty colocó el hortera pavimento que sirve para estampanar los sesos de la gente contra el suelo a poco que caen dos o tres gotas. Y lo peor que, en su etapa de delegado de Infraestructuras, no se le ocurrió preguntar qué necesidades ciudadanas había y menos qué inquietudes les generaban las iniciativas montesinistas. El problema ya os lo he comentado; Monty se cree tocado por la mano de Dios y como no le quitemos nosotros no se irá el tunante.
Este es el sino de la política local, quinientos veintinco años queriendo ser Alcalde y cuando está a punto de conseguirlo "se va de bareta", engaña a sus "socios" y acepta las migajas que le tiende el Pollo. A ver que os traen los Reyes mañana por la noche, yo ya he pedido que le dejen al Monty algo de carbón y sentido común; ahora que lo pienso de esto último mejor que no le deje nada, no vaya a ser que cambie y comience a hacer las cosas "como Dios manda".
No hay comentarios:
Publicar un comentario