viernes, 4 de abril de 2008

LOS SOCIALISTAS, SE TRAGAN EL SUPERAVIT PRESUPUESTARIO DE 2007

Las medidas aprobadas por los socialistas para rescatar al maltrecho sector inmobiliario , afectado por la crisis de ventas y la restricción del crédito, equivale al superávit logrado por la Administración Central en 2007 (13.500 millones). Por el momento, Zapatero ha inyectado directamente a los promotores unos 12.000 millones de euros. El rescate público de Bear Stearns ha supuesto a las arcas de EEUU 19.000 millones. Sin embargo, el rescate sabe a poco. Los constructores piden mucho más dinero.

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El plan ideado por el Gobierno para rescatar a los promotores y constructores en dificultades tiene visos de convertirse en el próximo Bear Stearns a la española, pero en materia inmobiliaria. Las empresas del sector padecen desde el pasado verano una profunda crisis del solvencia, debido al frenazo en seco en la venta de viviendas y a la creciente restricción del crédito por parte de bancos y cajas.
El Gobierno, pese a negar reiteradamente las alarmas de crisis en el sector, acude ahora en ayuda de los que, hasta hace poco, constituían uno de los principales problemas del país : La especulación urbanística.
De momento, el Gobierno ha puesto ya encima de la mesa el superávit público logrado en 2007 a disposición de los promotores y constructores. El Instituto de Crédito Oficial (ICO) lanzó ayer una línea de avales por un importe de 3.000 millones de euros para la titulización de préstamos de vivienda de protección oficial (VPO), cuyo objetivo es apoyar la financiación de vivienda protegida, una de las principales prioridades del Gobierno.


Inyecciones públicas a cargo de los contribuyentes

Y ello, con cargo expreso al actual superávit presupuestario: Los compromisos máximos autorizados a adquirir en los diferentes ejercicios son los siguientes: 2009, 2.507.113.350 euros; 2010, 2.456.971.083 euros; 2011, 2.206.259.748 euros y 2012, 1.855.263.879 euros.
En total, sólo ambas medidas ascienden a un gasto público próximo a los 12.000 millones de euros, a cargo de los contribuyentes. Algo menos del superávit alcanzado por la Administración Central en 2007 (13.526 millones de euros). Y eso que la Ley del Suelo ha causado el mayor daño económico al sector debido a la depreciación de activos que ha implicado su puesta en marcha
Así, si el Gobierno de EEUU se esfuerza en salvar bancos, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, parece centrar su atención en lanzar salvavidas a los promotores y constructores, a cargo de las cuentas públicas, en un momento de grave desaceleración económica.
Sin embargo, la deuda que acumula sólo las grandes inmobiliarias equivale a cerca del 12,6 por ciento del PIB, al situarse en 126.000 millones de euros. Por el momento, cerca de 16.000 millones están ya en una situación de alto riesgo a la espera de la negociación entre inmobiliarias y acreedores.

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